Mis rutas
ornitológicas

Estas son algunas de las rutas ornitológicas que he hecho en alguna ocasión.
Espero poder aportarte ideas para que tú las puedas hacer también.

El Soto de las Juntas (Rivas Vaciamadrid, Madrid)


Llamado así porque en este paraje se produce la unión de los ríos Jarama y Manzanares, me parece uno de los mejores enclaves para la observación de aves de Madrid. Pese a su cercanía a la capital, es un sitio bastante tranquilo y suele estar poco frecuentado.
Comienza nuestro recorrido en el aparcamiento que hay a la entrada del paraje. No es un aparcamiento demasiado grande, pero suficiente para los pocos visitantes que recibe la zona. Tomamos el camino que nos adentra hacia la laguna interior. En este camino, nos toparemos con pequeños pajaros como jilgueros, gorriones, buitrones, pardillos, alcaudones, estorninos, mirlos... Seguramente, en los meses primaverales y estivales, nos toparemos con los primeros milanos negros, sin duda alguna los reyes de la zona. También veremos conejos, muchos conejos. Porque en esta zona son muy abundantes.
Después de adentrarnos por el camino, llega un momento en que tenemos que elegir si seguir el camino de la izquierda o el de la derecha. Realmente da igual elegir uno u otro, pues se trata de un camino circular. Cojamos el camino de la izquierda, por ejemplo. Iremos paralelos al río Jarama, que queda a nuestra izquierda. En los grandes árboles que hay en la orilla de enfrente, podremos ver cigüeñas. También será fácil que veamos algún milano negro posado. En los árboles de nuestra orilla, se escuchará en los meses estivales a la oropéndola. También podremos escuchar o ver al mochuelo común. Si nos fijamos en el río Jarama, dependiendo de la época de año se podrán ver patos colorados, ánades azulones, porrones comunes, patos cuchara, calamones, porrones moñudos, zampullines comunes, fochas comunes, gallinetas comunes... Quizás también alguna nutria.
Tampoco será difícil encontrarte con diferentes especies de garzas, como la garza real, la garza imperial, el martinete, la garceta común o la garcilla bueyera, sobrevolando la zona o posadas en algún árbol.
Nos seguimos adentrando en el camino hasta llegar a la laguna que queda entre los 2 ríos. En este lado de la laguna existen 2 observatorios. Desde aquí, se pueden observar diferentes tipos de anátidas, somormujo lavanco, zampullín común, zampullín cuellinegro, focha común, gaviotas reidoras y sombrías... Obviamente, dependiendo de la época del año. Con algo de suerte, podremos observar al martín pescador.
Abandonamos los observatorios y seguimos por el camino paralelo al río. A medida que nos adentramos más, se ven más milanos negros, el rey indiscutible de la zona. En este lugar se produce la mayor concentración de milanos de Madrid. Además, es de los pocos lugares donde los milanos anidan en zonas rocosas, en vez de en árboles, que también lo hace.

Con algo de suerte, se podrán ver aguilillas calzadas en verano. Siguiendo por el camino, llega un momento en que el camino vira hacia la derecha. Esto es porque hemos llegado al punto donde se produce la "junta" de los 2 ríos, esto es, donde el Manzanares desemboca en el Jarama. Aquí el agua se queda remansada debido a que más adelante se encuentra el embalse del Rey. En este punto, a mediados del mes de Agosto, se produce una espectacular concentración de cientos o miles de milanos negros que preparan su viaje migratorio a África. Es uno de los fenómenos naturales más espectaculares que se pueden dar en Madrid. Iniciamos entonces el camino de vuelta, teniendo ahora a la izquierda el río Manzanares. En verano, los avistamientos de milanos son constantes, así como los de conejos, que son continuos. Otra preciosa ave migratoria nos aguarda en este lado del recorrido: El abejaruco. Este pájaro aprovecha el cantil que queda al otro lado de la orilla para anidar, y viene a esta zona junto al río y la laguna para alimentarse de insectos voladores. También veremos golondrinas y aviones comunes. Volvemos a pasar otra vez junto a la laguna. En este lado existe otro observatorio, ideal para la observaciones realizadas por la tarde.
Proseguimos nuestro camino y llegamos al punto donde tuvimos que tomar la decisión de tomar el camino de la izquierda o de la derecha. Habremos dado entonces, la vuelta a la laguna y podemos iniciar el camino de regreso al coche.
Cómo llegar: Desde Madrid, coger la A3 dirección Valencia. Hay que tomar la salida 19, ir por la vía de servicio unos metros y tomar la primera salida a la derecha como para entrar en Rivas-Vaciamadrid cruzando la A3 por encima. No hay que llegar a cruzar, sino que en plena curva, sale un camino a la derecha y existe un cartel de Protección Civil. Hay que salir para por ese camino y, a los pocos metros, coger otro corto camino que sale a la izquierda para entrar en el aparcamiento donde se deja el coche.